En todas las empresas existen colaboradores que, sin dejar su puesto de trabajo, tienen poco compromiso con éste y se limitan a hacer lo justo, y también existen aquellos que están activamente desvinculados, y son los que rinden al mínimo, escondiendo su insatisfacción. Regularmente por falta de empatía compartida.
Una desvinculación que mina la productividad de las empresas y se puede contagiar a los demás colaboradores, en principio comprometidos con la excelencia y el buen desempeño, los cuales se terminan “contaminando” del desinterés y de la falta de motivación al logro que acompaña a los no comprometidos.
Según el gigante de las encuestas, Gallup, los trabajadores de una empresa según su nivel de compromiso pueden clasificarse en tres categorías.
Niveles de compromiso de los trabajadores
- Comprometidos. Los talentos están muy implicados y entusiasmados con su trabajo y con formar parte de la empresa. Son «propietarios» psicológicos, impulsan el rendimiento y la innovación, y hacen avanzar a la organización.
- No comprometidos. Los empleados están psicológicamente desvinculados de su trabajo y de la empresa. Como sus necesidades de compromiso no se satisfacen plenamente, dedican tiempo -pero no energía ni pasión- a su trabajo.
- Activamente desvinculados. Son aquellos que no solamente son infelices en su Trabajo remoto, sino que están resentidos porque no encuentran satisfacción a sus necesidades y manifiestan su infelicidad. Cada día, estos trabajadores socavan potencialmente lo que logran sus compañeros comprometidos.
En los Estados Unidos, según datos de la encuestadora Gallup, sólo el 34% de los empleados pueden ser ubicados en el grupo de los comprometidos, un 50% en el de los no comprometidos, la mitad de toda la fuerza laboral americana, y el resto, un 14%, que está integrado por los trabajadores que están activamente desvinculados, aquellos que NO tienen ningún interés en su trabajo y que se limitan a simularlo o a hacerlo a regañadientes.
Y eso que Estados Unidos es una de las economías más sólidas del planeta, con altísimos índices de productividad y de generación de riquezas, nación que no tendría esos niveles de desarrollo si no fuera por el trabajo duro de su gente.
Una situación de desvinculación de los trabajadores que debe ser entendida y asimilada por los conductores de cualquier empresa a fin de intervenirla lo antes posible, si no para erradicarla, al menos para reducirla a niveles manejables.
Entre los factores más determinantes que se relacionan con la desvinculación o falta de compromiso de los trabajadores de una empresa, destacan:
Factores asociados a la desvinculación de los trabajadores.
- Deficiencias en la comunicación corporativa.
- Falta de confianza y colaboración.
- Inflexibilidad de condiciones de trabajo.
- Liderazgo no inclusivo ni transparente.
- Poca autonomía y empoderamiento.
- Falta de capacitación y/o de crecimiento personal.
- Bajos ingresos y ausencia de reconocimientos.
- Limitación de recursos y herramientas de trabajo.
- Estrés y agotamiento.
Factores todos que se relacionan con la falta de comunicación a lo interno de las organizaciones, ya que, como seres gregarios que somos, incluso si trabajamos en remoto, dependemos de la comunicación y de las buenas relaciones para poder participar y sentirnos integrados a cualquier esfuerzo colectivo.
La comunicación corporativa eficaz
Si algún elemento hace la diferencia a la hora de lograr el mayor compromiso por parte de los trabajadores de una empresa, sin duda es la comunicación.
En la medida que los trabajadores de una organización se sienten tomados en cuenta y participan de las decisiones de la empresa, mantienen un trato fluido y frecuente con compañeros y superiores, y sienten que pueden compartir con ellos sus intereses e inquietudes, en esa misma medida se sentirán a gusto de permanecer en la empresa, y estarán dispuestos a dar lo mejor de sí.
Por eso, es muy importante que los directivos tengan presentes los siguientes tips en materia de comunicación corporativa:
Si quieres saber más de comunicación asertiva, no te pierdas este artículo.
Tips para la mejor comunicación corporativa:
+ Celebre reuniones periódicas uno a uno.
+ Procure que las reuniones de equipo sean concretas, cordiales y constructivas.
+ Pregúnteles a sus empleados sobre su trabajo y tome en cuenta sus ideas.
Costos de la desvinculación y desincorporación de los trabajadores.
No cuidar la buena comunicación corporativa es abonar a la desvinculación de los trabajadores, lo que se traduce en pérdidas de tiempo, dinero y productividad para las organizaciones, circunstancia que las lleva a tener que iniciar un nuevo proceso de selección, lo cual requiere inversión de tiempo (que se traduce en dinero).
Dificultades adicionales derivadas de la desvinculación definitiva del personal.
+ Incremento en gastos de seguridad ante la eventual fuga de datos.
+ Presión en la gestión de RR.HH. y/o necesidad de apoyo externo.
+ Inversión de recursos y horas-hombre en procesos de selección.
+ Negociaciones con potenciales candidatos.
+ Diseño e instrumentación del Onboarding para los nuevos ingresos.
Si quieres conocer más sobre Onboarding tenemos un artículo que habla de su importancia, visítalo cuando quieras.
La desvinculación de los trabajadores no es inevitable. Podemos contenerla o atenuarla si actuamos con mentalidad ganadora:
Sí, con la mentalidad de ganar – ganar. Que la empresa gane, en ventas, en rentabilidad, y en sostenibilidad a futuro. Y que también lo haga su personal, en ingresos, en satisfacción personal y profesional, en capacitación, y en ganas de hacer carrera dentro de la organización.
Steve Jobs decía:
“Si quieres contratar a gente maravillosa debes tener claro que tienes que dejarlos trabajar, que tomen sus propias decisiones y hasta aceptar que te critiquen”. Porque, “las personas talentosas trabajando juntas se pulen las unas a las otras, pulen ideas, y lo que generan son piedras preciosas”.