La administración o gestión de un equipo en remoto puede volverse una tarea desafiante, pero se puede optimizar aplicando un buen feedforward. La metodología que existe y fue creada para aumentar la productividad y el desempeño laboral.
Cuando existen muchas herramientas o recursos que sumen a nuestra rutina laboral, es más probable que se ejecuten las tareas más fácilmente. Sobre todo, con talentos o equipos situados en diversas ubicaciones geográficas, trabajando por un mismo objetivo.
Y ya que hablamos de la gestión efectiva de talentos, te contamos que tenemos nuestro servicio de Talent Management. Puedes darle un vistazo cuando quieras.
¿Qué es el feedforward?
Es un concepto originado introducido al mercado por Marshall Goldsmith, un coach de negocios, que está ganando mucha relevancia en los últimos tiempos. Se encarga de ofrecer la solución encaminada hacia el futuro, en lugar de juzgar o quedarnos con su desempeño en el pasado del talento.
Es una herramienta que quizá ya aplicas en tus talentos, puesto que comienza a tener efecto cuando nos ponemos en contacto con un talento para evaluar su rendimiento profesional.
Ejemplo: se acerca a ti (como líder o gerente) un talento a pedir un consejo sobre un problema. Lo ideal, es concentrar esfuerzos por sugerir posibles soluciones para el desafío que se le presenta, en lugar de solo comentar los comportamientos que lo pueden haber llevado a tener ese problema.
Con el feedforward nos enfocamos más en el desarrollo a futuro. Probando que es más productivo enseñar a las personas a estar en lo «correcto», que probarles que estaban «equivocadas».
Algunos de sus beneficios para tus talentos en remoto
Implementar buenas estrategias que favorezcan a la comunicación en remoto es esencial, para el éxito de la misma. El feedforward tiene ventajas en un montón de circunstancias, como pueden ser:
- Al enfocarse en el futuro y la mejora del mismo, se evitan comentarios innecesarios sobre eventos del pasado que no se pueden modificar.
- Es muy conductual, enfocándose en acciones específicas, en lugar de ideas mucho más generales o sin enfoque.
- Promueve el autodesarrollo con empoderamiento y ofreciendo rutas opcionales para avanzar.
- Refuerza las buenas conductas y dinámicas de grupo.
- Ayuda a resolver situaciones muy recurrentes con herramientas reales.
- Los talentos se sienten más motivados y cómodos al recibir los consejos, en vez de criticados o juzgados por sus acciones.
A medida que aplicamos esta técnica en nuestras empresas, incluso en la vida personal, notaremos los buenos resultados. Nos creará un buen hábito de mirar hacia adelante en situaciones inevitables, en lugar de siempre hacia atrás y arrepentirnos de lo que ya ocurrió.
Por otra parte, puede que sea más fácil hacer un feedforward, antes que llegar al punto de ofrecer un feedback. Aunque ambas son potenciales herramientas, debemos conocer sus diferencias.
Diferencias del feedforward con el feedback
Traducido el término feedforward al castellano, viene siendo como una «pre-alimentación», a diferencia del feedback, que es considerado una retroalimentación. Iremos comentando a detalle cuáles son sus principales diferencias:
El feedforward:
- Origina el impulso necesario para un cambio o mejora.
- Anticipa.
- Expande las posibilidades o solucione enfocadas.
- Es muy específico.
- No contiene críticas.
- No genera un juicio.
- Es rápido y eficiente.
El feedback:
- Es más estático.
- Corrige.
- Necesita conocer el contexto de lo ocurrido, para señalar los problemas.
- Puede ser un poco más general.
- Se puede ver afectado por prejuicios u opiniones subjetivas.
- Puede generar o implicar un juicio (no siempre).
- Aunque es eficiente, puede llevar más tiempo aplicarlo.
Un ejemplo práctico, como nos gusta compartir para que se entienda todo mucho mejor. En muchos casos puede ocurrir la siguiente situación:
Problema: «la atención al cliente final está siendo poco efectiva».
En lugar de enfocarnos en hacer ver que las habilidades para la atención al cliente han sido menos efectivas en el pasado (feedback), y quedarnos atrapados criticando esto. Podemos otorgar sugerencias sobre cómo manejar las preocupaciones de nuestros clientes en el futuro (feedforward), y avanzamos de forma efectiva.
¿Cómo implementamos el feedforward en nuestra empresa?
Al ser una técnica bastante simple y fácil de implementar, se puede poner a prueba tanto en el día a día laboral o en la vida personal. Pero puedes iniciar por los siguientes pasos:
- Describir la meta: de forma breve y directa «quiero personalizar mis ventas a los diversos tipos de clientes».
- Generar ideas: los talentos en remoto seguramente tendrán ideas de cómo poder alcanzar esa meta. En este punto es importante no enfocarse en el pasado o crear un juicio sobre la meta. La determinación debe estar en progresar: «para lograrlo podemos generar un resumen muy específico de cada nuevo cliente, así entender mejor su mercado y sus necesidades».
- Escuchemos recomendaciones: lo mejor es escuchar los consejos que tienen tus talentos y anotar todo para sacar mayor provecho. Explorar las opciones: «¿Qué es lo mejor o peor que puede pasar?»
- Siempre dar las gracias: a veces un simple agradecimiento a las ideas aportadas en una conversación es más que suficiente. Al incurrir en agregar algo más podemos entrar en juicios y subjetividad. Es la diferencia entre «Gracias» y «Gracias, es una gran idea», donde con la última se está emitiendo un juicio.
- Cambiemos de papel: podemos repetir el proceso, pero esta vez con el talento indicándote el objetivo y tú brindándole comentarios como líder o gerente de equipo.
Para la gestión de tu talento en remoto se necesitan de las herramientas y los equipos adecuados para medir la evolución y su desempeño. Un equipo de Talent Support se ha vuelto algo vital para cualquier organización, siendo el apoyo al iniciar y mantener una relación empresa/talento.
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